Analizando Donten ni Warau

Uno de los animes del pasado 2014, basado en el manga del mismo nombre y también conocido como “Laughing Below the Clouds”, Donten ni Warau (曇天に笑う).


Ficha técnica: 

– Género: Acción, fantasía, drama, aventura
– Temporadas: Una temporada de 12 episodios (2014)
– Estudio: Dogakobo
– Idioma: voces en japonés e inglés, subtítulos en español.
– Adaptaciones: manga usual “Donten ni Warau”, otros mangas “Donten ni Warau Gaiden” y “Rengoku ni Warau”.


Análisis deepest:

Donten ni Warau tiene lugar en un período histórico de Japón, la Restauración Meiji (que comenzó en el año 1878) y que supuso una época de cambios y cierta inestabilidad en el país. Sin embargo, no se trata de un anime meramente histórico sino que la historia se verá envuelta en una serie de factores sobrenaturales. 



En fashioned, se muestra el Japón de la época bien reflejado en cuando a las gentes, las edificaciones y las costumbres reales más allá de la historia fantástica que tendrá lugar en el anime.


En cuanto al argumento, todo comienza mostrando la vida de los tres Hermanos Kumo, huérfanos que viven bajo el cuidado del mayor de ellos y que son conocidos en la zona por ser los encargados de apresar y trasladar a los criminales traídos de todo Japón hasta la prisión de Gokumonjou, en medio del Lago Biwa. Detrás de esta straightforward trama se irá descubriendo la historia de los tres hermanos y de varios personajes que les rodean, ofreciendo varios giros sorprendentes y dramáticos de crucial importancia tanto para la vida deepest de los protagonistas como para todo Japón. Una historia algo forzada en algunos puntos, dejando algunos aspectos un poco abandonados y poco explicados pero con otros capítulos realmente emotivos, emocionantes y sorprendentes. Una curiosa mezcla de de ficción histórica y pura fantasía.

En Donten ni Warau uno de los puntos que más llama la atención es, sin duda, el de los personajes. Los tres Hermanos Kumo son especialmente llamativos en conjunto, dando un aspecto completamente épico como protagonistas. Por separado, el mayor de ellos, Tenka, no deja de ser un personaje bastante típico (muy parecido en algunos aspectos a Kamina de Tengen Toppa) pero que le da muchísima gracia a la serie. El mediano, Soramaru, en torno al cual gira la mayor parte de la serie se identifica con un tipo de protagonista shounen no demasiado usual y el pequeño, Chutaro, aunque algo menos desarrollado como personaje, ofrece una visión diferente de los hechos desde la inocencia de un niño que a la vez tiene la responsabilidad de ser un Kumo.

No son los únicos personajes trabajados y encontraremos otros como Shirasu (posiblemente mi personaje preferido), Botan o Sousei. A pesar de ello, parece que queda pendiente desarrollar y darle algo más de relevancia a algunos personajes que se quedan a medias, posiblemente por el número reducido de episodios de la serie. 


El apartado técnico cuenta con una banda sonora bastante buena, comenzando por el tema de la intro (a mi parecer una intro muy destacable) y unos temas a lo largo de la serie con mucha fuerza que mezclan música orquestada e instrumentos eléctricos, que ayudan a impulsar los mejores momentos de la serie. Sin duda uno de los buenos aspectos del anime.

Respecto al estilo artístico, sin duda está también muy trabajado y especialmente en lo que respecta a los personajes. Cada detalle en ellos está cuidado, incluso cada pose y cada encuadre dentro de las escenas. Los escenarios, por otro lado, también están muy cuidados, ofreciendo a menudo (aunque no en todas las situaciones) un aspecto sombrío que da la ambientación a la serie. La animación no es especialmente llamativa, centrándose en escenas algo estáticas aunque sí que ofrece movimientos fluidos cuando son necesarios.

Como conclusión, Donten ni Warau es un anime entretenido, con personajes de los que te gustaría haber conocido algo más de lo que te dejan ver y con una historia que te deja con la sensación de que todo ha terminado pero podría haberse detallado más el proceso. No obstante, el estilo artístico, la banda sonora y el carisma de los protagonistas te hacen disfrutarla a pesar de algunas carencias. Son 12 episodios que merece la pena ver en algún momento.